Sostenibilidad en las empresas: pilar estratégico apoyado por la tecnología verde
Cuando nos referimos a la situación climática de nuestro planeta los datos hablan por sí solos. Según un nuevo informe de la Organización Meteorológica Mundial, hay un 80 % de probabilidades de que la temperatura media anual del planeta aumente en 1,5 °C durante los próximos cinco años. Esta es sólo una de las tantas referencias e índices que advierten de la importancia de actuar a tiempo, no para revertir las consecuencias del cambio climático, sino para frenarlo.
Podríamos decir que nos situamos en un entorno empresarial cada vez más consciente de la importancia de la sostenibilidad. Tal y como apuntan la app Nästa y la consultora de RRHH Fresh People en un informe conjunto, más del 80% de las empresas de más de 250 trabajadores de nuestro país han situado la sostenibilidad en el centro de sus estrategias. El cambio se vuelve imperativo, por ejemplo, apostando por la reducción de la huella de carbono, así como la implementación de beneficios sociales para los empleados.
Nos preguntamos si hay alguna consecuencia para aquellas empresas que no apuesten por la sostenibilidad, y lo cierto es que no apostar por el planeta podría “salirle caro” a las compañías. Según el último índice Kantar Sustainability BrandZ, el 67% de los consumidores cree que es responsabilidad de las empresas tratar de paliar el cambio climático. Más de la mitad de las personas encuestadas en este estudio quiere que las marcas reduzcan las emisiones derivadas de su actividad.
La importancia de la sostenibilidad en tecnología
La tecnología ha impulsado el crecimiento y la eficiencia de la empresa, pero también ha generado un impacto ambiental, derivado de los recursos naturales empleados para su fabricación, los residuos electrónicos o las emisiones de gases de efecto invernadero. Por ejemplo, según la Agencia Internacional de la Energía, el consumo de los centros de datos de los grandes operadores en 2021 representaba entre el 0,9% y el 1,3% de la demanda final de electricidad mundial. De nuevo, los datos hablan por sí solos.
Pensemos también en una de las herramientas más empleadas en nuestro trabajo, como puede ser un ordenador, y en su consumo energético. La Comisión Europea apunta que un ordenador encendido emite cada hora entre 52 y 234 gramos de CO2; además del impacto que genera en el medio ambiente tras su vida útil. Frente a esta realidad, empresas como HP han puesto en marcha planes y acciones que pretenden equilibrar la balanza entre los beneficios de la tecnología y el futuro de nuestro planeta.
HP ha desarrollado una de las iniciativas más avanzadas en términos de sostenibilidad tecnológica, conocida como programa HP Amplify Impact, del que Grupo Solitium es partner. La misión de HP es empoderar a sus socios para que adopten prácticas más sostenibles y las promuevan entre sus clientes, poniendo a disposición de sus socios ordenadores y equipos de impresión más sostenibles; por ejemplo, el ordenador portátil HP Elite Dragonfly, que está fabricado con plásticos reciclados.
Promoviendo la sostenibilidad a través del uso tecnológico
El compromiso con la sostenibilidad no se limita a la elección de los equipos o dispositivos más sostenibles, sino que también se debería extender al uso que hacen las empresas en su día a día. Entre algunas estrategias clave que las organizaciones pueden implementar para promover la sostenibilidad en su entorno tecnológico, podríamos mencionar las siguientes:
- Imprimir cuando lo necesitemos: la cultura de la impresión digital puede reducir el desperdicio de papel significativamente. Las empresas deben fomentar entre sus empleados la práctica de imprimir sólo lo que realmente necesitan. Para ello sería de gran ayuda también incorporar un gestor documental y la firma electrónica.
- Apostar por equipos con certificaciones de eficiencia energética: los dispositivos con certificaciones como Energy Star garantizan que son energéticamente eficientes, lo que reduce el consumo eléctrico y, por lo tanto, las emisiones de carbono asociadas.
- Trabajar en una estrategia sostenible para el entorno IT: por ejemplo, a través de la virtualización y el cloud computing, o llevando a cabo una gestión eficiente del ciclo de vida de los datos, a partir del archivado inteligente de los mismos, evitando copias redundantes y comprimiendo los datos cuando sea posible.
- Implementar políticas de apagado automático: configurar los dispositivos para que se apaguen o entren en modo de suspensión cuando no se están utilizando es una manera sencilla pero efectiva de reducir el consumo energético de la oficina. Impresoras y multifuncionales como las de HP permiten ajustar el modo de reposo, reduciendo el consumo de energía durante periodos de inactividad.
- Favorecer el uso de materiales reciclados y reciclables: desde ordenadores hasta impresoras, optar por equipos fabricados con materiales reciclados contribuye a la economía circular, reduciendo la necesidad de extraer nuevos recursos y disminuyendo los residuos electrónicos.
- Gestión responsable de residuos electrónicos: las empresas deben establecer programas de reciclaje y correcta disposición de equipos tecnológicos obsoletos, colaborando con entidades certificadas para asegurar que los residuos electrónicos no terminen en vertederos, sino reciclados de manera segura. HP cuenta con servicios para recuperar, reutilizar y reciclar tecnología.
En definitiva, cómo hagamos uso de la tecnología condicionará el futuro de nuestro planeta. La sostenibilidad en las empresas es un camino continuo y la tecnología es una herramienta fundamental en este viaje. Las empresas que integran prácticas sostenibles en su estrategia tecnológica no solo estarán contribuyendo a la preservación del medio ambiente, sino que también se posicionarán mejor en un mercado global donde la conciencia ambiental es cada vez más valorada.