5 obstáculos en la digitalización de las empresas
La transformación digital de las empresas es una tarea que, aunque necesaria, sigue estando pendiente para muchas organizaciones. Enfrentar los desafíos y retos heredados de la digitalización y encontrar las soluciones más adecuadas es ahora un ejercicio que deben hacer las compañías para dar respuesta a un mercado cada vez más exigente.
El acelerado desarrollo tecnológico está cambiando el panorama empresarial de forma constante. Este nuevo escenario reclama pensamiento ágil, colaboración y una transición digital exitosa. ¿Pero, es esto posible?, ¿a qué retos nos enfrentamos?
- Los datos: El gran desafío
La IA, que ha superado la fase piloto y ya está adentrándose en la realidad de la producción empresarial, está poniendo contra las cuerdas a unas organizaciones que adolecen de unos sistemas heredados incapaces de gestionar el nuevo volumen de datos, y la carencia de recursos. Este obstáculo, unido a la dificultad para procesar toda esa información, está obligando a los departamentos IT a remodelar sus infraestructuras y apostar, en muchos casos, por estrategias de Nube Híbrida que puedan dar respuesta a las diferentes necesidades de trabajo, aplicaciones, ubicaciones, etc. Un cambio drástico que, en muchas ocasiones, requiere de orientación especializada para abordarlo. De ahí que, empresas como Grupo Solitium en colaboración con fabricantes de la talla de HPE, organicen eventualmente jornadas para explicar, también con demostraciones prácticas, las nuevas soluciones para enfrentar la transformación en la arquitectura de las organizaciones. Unas soluciones que deben contar, obligatoriamente, con sistemas para mantener la seguridad de los datos. Y ese es otro desafío para tener en cuenta, porque muchas empresas nunca han visto la ciberseguridad como una necesidad para sus organizaciones por considerarse poco relevantes para los hackers. Pero esto no es así, y se ha demostrado en muchas ocasiones. No tener actualizados los sistemas de seguridad ni contar con una plantilla formada en este sentido son dos riesgos que ninguna empresa debería asumir.
- Integración tecnológica
Para que la transformación sea exitosa debe haber líderes que la capitaneen y que cuenten con la experiencia necesaria para integrar las nuevas tecnologías de forma eficaz y con el seguimiento oportuno para probar y solucionar problemas antes de poner en marcha ningún proceso. En este sentido, es fundamental alinear las capacidades tecnológicas con los objetivos empresariales y la formación de la plantilla.
- Resistencia al cambio
Otro reto que superar, y este no es de carácter técnico, es el miedo al cambio. Un temor muy común que hace que los empleados se resistan al uso de las nuevas tecnologías y procesos, y que puede, incluso, hacer descarrilar los esfuerzos de una transformación bien diseñada y ejecutada.
Integrar a toda la plantilla en este cambio, hacerla partícipe y formarla en las nuevas maneras de hacer las cosas es fundamental, como también lo es comunicar bien las ventajas que va a suponer el nuevo escenario y cómo quedará cada uno de los profesionales en el organigrama, para que no surjan dudas ni malentendidos.
Según un estudio de McKinsey, las empresas que dan prioridad a los factores culturales en las transformaciones digitales tienen hasta cuatro veces más posibilidades de éxito que aquellas que sólo se centran en la parte tecnológica y se olvidan de sus plantillas. El compromiso de los empleados sea cual sea el contexto, siempre será el pilar principal para el futuro de cualquier organización.
- Responder adecuadamente a los desastres
El cambio no está dándose únicamente en las empresas, también en la sociedad en general, que se debe adecuar a los distintos escenarios que puedan darse y a las nuevas generaciones que se incorporan a las organizaciones. De ahí que toda compañía deba estar preparada ante cualquier imprevisto, y para esto la tecnología es crucial. Contar, no sólo con un sistema de recuperación ante desastres como los que ofrece Grupo Solitium con soluciones de backup de última generación para la optimización de la protección de datos, sino también con soluciones de virtualización para el mejor uso de recursos y aumentar la flexibilidad son esenciales ahora mismo en cualquier empresa que quiera avanzar.
- Gestión ágil
La digitalización implica flexibilidad y pensamiento ágil. En un entorno tan cambiante como el actual, con un desarrollo tecnológico tan acelerado, es imprudente quedarse estancado en los sistemas del pasado porque se corre el riesgo de desaparecer. Las organizaciones deben estar abiertas al cambio y prepararse para que esa revolución no les obligue a una brusca metamorfosis sino a una evolución coordinada y meditada. Y, en este sentido, muchas requieren de un partner que las ayude y las oriente en la incorporación de las mejores soluciones para su digitalización, desde un buen gestor documental hasta un software de gestión empresarial que les facilite el proceso. Además (no nos podemos olvidar) de sistemas capaces de sostener el almacenamiento ordenado, la gestión y la protección de unos datos que son, cada vez más, los puntos más críticos para cualquier compañía.