Grupo Solitium desvela las ventajas que ofrece la Fabricación Aditiva en el sector Salud
La Generalitat Valenciana, junto a la Agència Valenciana de la Innovació, al Departament de Salut Xàtiva-Ontinyent y a la Fundación para el Fomento de la Investigación Sanitaria y Biomédica de la Comunitat Valenciana organizaron el pasado martes un encuentro con empresas innovadoras para conocer todo lo que las nuevas tecnologías pueden hacer por el sector sanitario.
La Impresión 3D se ha revelado como una de las principales palancas de cambio del mercado actual. El abanico de posibilidades que ofrece para mejorar nuestras vidas parece no encontrar límites. Y para muestra, su aportación a la medicina.
De hecho, a finales de la década de 1990 se realizaron estudios sobre el uso de la fabricación aditiva en el sector médico, pero no fue hasta 2005 cuando se empezaron a emplear estas soluciones de forma reglada. A día de hoy, a pesar de que aún quedan retos por superar, la impresión 3D se ha desvelado como la base para la cirugía personalizada, para implementar controles de calidad e introducir mejoras en la seguridad quirúrgica.
Éstas fueron sólo algunas de las reflexiones que se escucharon el pasado martes, 11 de diciembre, en el marco de ‘Diálogos Tecnológicos’, un evento celebrado en el salón de actos del Hospital Lluís Alcanyís de Xàtiva entre empresas innovadoras y médicas, organizado con el fin de conocer todas las aplicaciones reales que se están creando para mejorar el sector sanitario. Una cita a la que no podía faltar el director de la Línea 3D de Grupo Solitium, José María Ferrándiz, quien trató de explicar en qué momento está ahora la fabricación aditiva en el entorno hospitalario.
Y es que en la actualidad el uso de la fabricación aditiva en el mundo de la salud se encuentra con dos desafíos: el médico y el formativo. Esta nueva tecnología requiere la cualificación de los técnicos que vayan a utilizarla y educar tanto a facultativos como a pacientes para que entiendan sus ventajas. De ahí la importancia de los servicios de ingeniería de Grupo Solitium, “que ayudan en la aplicación de las principales tecnologías”, sostiene Ferrándiz, y de las que se tiene que conocer tanto su mantenimiento como su aportación clínica.
Algo que supo explicar el director de la Línea de Impresión 3D de Grupo Solitium, quien reconoció que era tan importante contar con expertos que puedan mantener estas tecnologías en términos de tiempo, coste, obsolescencia y diseño, como conocer su mejor uso en la mejora de la planificación de cirugías, en los preoperatorios y en el I+D (guías quirúrgicas, piezas finales, etcétera).